La taxonomía o sistemática es la rama del conocimiento biológico que se relaciona con el reconocimiento, descripción, nomenclatura y clasificación de los seres vivos.
Un sistema de clasificación útil para los naturalistas debe basarse en criterios tales que permita organizar de manera consistente a todos los organismos conocidos y por conocer. Así lo entendió Karl von Linné, naturalista sueco del siglo XVIII, que propuso por primera vez el sistema de clasificación usado en la actualidad por todos los biólogos y naturalistas del mundo.
El sistema moderno de clasificación de los seres vivos utiliza agrupamientos llamados taxones. Los siete taxones básicos, enumerados en orden decreciente de tamaño son:
Reino – Phylum (División) – Clase – Orden – Familia – Género – Especie.
Los grupos mencionados forman una jerarquía. El Reino contiene generalmente a dos o más Phylum, a su vez cada Phylum contiene a dos o más Clase y así sucesivamente hasta llegar a Género, que contienen una o muchas Especies.
Cada grupo en la jerarquía incluye una variedad de características cada vez más específicas (o menos generalistas) que el grupo inmediatamente superior. En general, los seres vivos pertenecientes al mismo taxón se relacionan evolutivamente entre sí, y esas relaciones son más estrechas (comparten más características específicas) a medida que descendemos en la jerarquía taxonómica. Para clasificar un organismo, los biólogos, naturalistas y otros estudiosos de la naturaleza, comienzan por determinar el Phylum (o en algunos casos el Reino) y continúan descendiendo hacia taxones cada vez más específicos y más restringidos según sus características, hasta llegar a determinar el género y la especie.
Linné propuso también un sistema de nomenclatura binario para identificar a cada especie. Este sistema consiste en la identificación de cada especie a partir del empleo de 2 nombres, uno genérico y otro específico, escritos en latín.
Por ejemplo, todos los algarrobos pertenecen al género Prosopis. El árbol conocido como algarrobo blanco se denomina en la nomenclatura científica Prosopis alba.
Prosopis alba
Epíteto genérico↗ ↖ Epíteto especifico
El Algarrobo negro, en cambio, se denomina Prosopis nigra.
Prosopis nigra
Epíteto genérico↗ ↖ Epíteto especifico
La mayoría de la gente cree que los nombres taxonómicos son largos y difíciles. Sin embargo, su propósito es el de construir un sistema de nomenclatura simple y preciso que pueda ser usado por igual en todas partes del mundo, evitando la ambigüedad de los nombres vernáculos, comunes o regionales.
Por convención, los nombres genéricos son sustantivos en singular, escritos con inicial mayúscula. Los epítetos específicos son adjetivos agregados al nombre genérico, escritos con inicial minúscula. Ambos pueden aludir a diversas características de la especie nombrada (morfología, distribución geográfica, etc.) o estar dedicados a una persona. Otra convención normalmente aceptada es la de escribir los nombres científicos en una tipografía especial, normalmente bastardilla o itálica.
Finalmente, para que la indicación del nombre sea completa, exacta y fácilmente verificable es necesario agregar la sigla, es decir, el nombre del autor que publicó la primera descripción formal de la especie, o su abreviatura.
Se reconocen 2 tipos de sigla:
A.-Sigla simple: formada por el nombre del o los autores del epíteto.
Por ejemplo:
Prosopis alba Griseb
Significa que el señor Grisebach fue el primero en publicar la descripción del Algarrobo blanco.
B.- Sigla doble: cuando un epíteto es transferido de un género a otro, o de una variedad a especie, el binomio resultante es una nueva combinación. En este caso lleva una sigla doble compuesta por el nombre del creador del epíteto entre paréntesis, seguido por el nombre del autor de la transferencia.
Por ejemplo:
Prosopis chilensis (Mol.) Stuntz
Significa que Molina fue el primero en describir este algarrobo, pero lo clasificó en otro género (Ceratonia). Posteriormente Stuntz transfirió el epíteto al género Prosopis.
Categorías infraespecíficas: (Variedad, subespecie, etc.)
Cuando se presenta un taxón infraespecífico se sigue para denominarlos una forma trinomial de nomenclatura.
Por ejemplo:
Canna glauca L. var. rubrolutea Hooker
Bibliografía utilizada
Biología. 2000. H. Curtis y N.S. Barnes. 6º Ed. Editorial Médica Panamericana. Buenos Aires. 1498 pp.
Biología de Villee. 1996. E.P. Solomon , L.R. Berg, D.W. Martin, y C. Villee, Tercera Edición. Interamericana Mc. Graw-Hill. México. 1193 pp.
Apuntes – Manual de Clases. Biodiversidad I. FTA – UPC. Unidad I “Nociones de
taxonomía y clasificación de los seres vivos”.
