Tengo clases de ruso con Ana desde que empezó el confinamiento. He aprendido mucho con su método sencillo y efectivo, escalando desde partículas básicas hasta formas verbales más complejas, pasando por aprender preposiciones y muchas palabras de diferentes contextos (alimentación, comparación, naturaleza, relaciones sociales, etc). Lo mejor es que aunque sea un idioma complicado, con esta profesora y los juegos que ella misma crea, aprender es muy ameno y resulta más fácil de lo que esperaba. Tras un mes con ella, me descubrí a mí mismo diciendo sin dificultad numerosas expresiones cortas en ruso sin mayor complicación. Con el tiempo, llegué a pensar fácilmente algunas cosas en ruso y a desarrollar de memoria formas verbales sencillas, y eso me motivó mucho a seguir estudiando el idioma.
A cualquier persona que tenga pensado iniciarse en este idioma le recomendaría estas clases que me han sido tan llevaderas y efectivas.
Ver más
Ver menos