Alba Alonso Olariaga

Debido a que soy joven, he pasado por muchos profesores que no se involucran con sus alumnos, que solo van a ganar dinero. Personalmente considero que es muy importante, además de preocuparse por la vida académica del alumno, poder hacer que tenga curiosidad sobre la asignatura, convertirlo en algo divertido que le apetezca hacer.
En las clases se realizarán las tareas que se hayan mandado ese día y además se trabajará en proyectos que se hayan pedido. En caso de tener examenes o querer reforzar alguna enseñanza que se les haya impartido en clase, se revisarán y explicarán, buscando así que el alumno pueda entender la lección y no tenga dudas, o sino las mínimas, sobre el temario.
Para los más peques, también se plantearán juegos y actividades para reforzar los contenidos que se hayan explicado en clase de forma que el alumno pueda, como ya se ha mencionado anteriormente, sentirse cómodo y que al día siguiente no tenga problemas para continuar con las clases.
Mis métodos de enseñanza se basan en la pasión por las asignaturas que se están impartiendo, esto se debe a que considero que si el alumno ve que el temario que se está explicando me gusta y me divierte, él o ella podrían querer sentir lo mismo y por tanto les gustaría trabajar en ello.
Mi experiencia viene de años atrás cuando iba a cuidar dos días en semana de dos niñas pequeñas, además de pasar la tarde con ellas también las ayudaba a hacer deberes, leer, hacer actividades… Fue en este momento cuando me di cuenta de lo mucho que me gustaba poder ayudar. A partir de ese momento, tuve claro que me quería dedicar a ello. ¿Me ayudas a hacerlo realidad?