Mi nombres es Álvaro, tengo 30 años y soy de Mijas, Málaga. Llevo practicando yoga muchos años, meditación, reiki, y otras disciplinas orientales y espirituales. He viajado por medio mundo con una mochila a la espalda, y en 2.019 me titulé como profesor de Hatha Yoga restorativo en Mysore, India. Desde entonces he dado clases en Málaga, Bali y Tailandia, además de clases online privadas. Soy una...
Mi nombres es Álvaro, tengo 30 años y soy de Mijas, Málaga. Llevo practicando yoga muchos años, meditación, reiki, y otras disciplinas orientales y espirituales. He viajado por medio mundo con una mochila a la espalda, y en 2.019 me titulé como profesor de Hatha Yoga restorativo en Mysore, India. Desde entonces he dado clases en Málaga, Bali y Tailandia, además de clases online privadas. Soy una persona tranquila, transparente, honesta y flexible. Transmito con mucha pasión lo que para mi es el Yoga, un estilo de vida que va mucho más allá que las asanas (posturas físicas). Hace años me inicié en reiki, y sin duda ha sido una gran revelación en mi vida, la cual aplico sus principios a mis prácticas y enseñanzas del Yoga.
Mi práctica de yoga se basa principalmente en Hatha yoga tradicional, una práctica muy holística que equilibra cuerpo, mente y alma, pasando de ejercicios meditativos, posturas vigorosas que activan nuestro cuerpo físico y lo flexibilizan. Equilibrio, fuerza, flexibilidad, meditación, respiración, relajación, conexión. Todo esto y mucho más encontrarás en cada clase. Te acompaño en este maravilloso proceso de autodescubrimiento y exploración, de apertura y conexión.
En los tiempos que corren, el mundo está sacudiéndonos con sucesos que nos hacen temblar, perdemos el norte, nos sentimos perdidos, aparece el estrés, la preocupación, la ansiedad, nos volvemos sedentarios, descuidamos la alimentación y otras muchas cosas. El ritmo de vida cada vez es más rápido, la tecnología toma las riendas de nuestra vida, poniéndo la atención en un mundo paralelo. Aún así es importante entender que es una herramienta, pero hay que usarla con cabeza.
Estar en contacto con nuestra paz interior es más sencillo de lo que puedes creer, Si quieres aprender cómo aventúrate a esta práctica milenaria.
Namaste.
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