Durante 4 años, he visto alumnos de muchos tipos, pero sobre todo, desmotivados. Sienten que pierden el tiempo en las aulas y al llegar a casa no consiguen avanzar por su cuenta, haciendo que pierdan interés y lleguen a un suspenso.
Más allá de una nota, yacen los conocimientos, ya que toda materia se puede reducir a unos conceptos básicos, que quizá no se atendieron en su momento, o quizá ya se...
Durante 4 años, he visto alumnos de muchos tipos, pero sobre todo, desmotivados. Sienten que pierden el tiempo en las aulas y al llegar a casa no consiguen avanzar por su cuenta, haciendo que pierdan interés y lleguen a un suspenso.
Más allá de una nota, yacen los conocimientos, ya que toda materia se puede reducir a unos conceptos básicos, que quizá no se atendieron en su momento, o quizá ya se han olvidado. Reavivar esos conocimientos y desafiar a los alumnos a usarlos es la única manera de que esas competencias prevalezcan y se refuercen, y muchos alumnos han olvidado ya lo gratificante que es saber hacer aquello que te piden que hagas.
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