Tengo un poco de experiencia dando clases a mis primos y sobrino, y me caracterizo por tener mucha paciencia y ser muy perfeccionista, ya que quiero que mis alumnos aprendan a la vez que se diviertan. Para ello empleo juegos y otras actividades que les sirvan para aprender, de modo que no vean las clases como un trámite que deben pasar, sino como una forma de relax y diversión, porque no hay mejo...
Tengo un poco de experiencia dando clases a mis primos y sobrino, y me caracterizo por tener mucha paciencia y ser muy perfeccionista, ya que quiero que mis alumnos aprendan a la vez que se diviertan. Para ello empleo juegos y otras actividades que les sirvan para aprender, de modo que no vean las clases como un trámite que deben pasar, sino como una forma de relax y diversión, porque no hay mejor manera de aprender que disfrutando de ello.
Una forma muy interesante y común de aprender a hablar un idioma, que es la parte más difícil en el proceso de aprendizaje, consiste en ver películas, series o programas en versión original. Puede que al principio no entendamos nada, pero poco a poco el oído se hace a los acentos y nos facilita el aprendizaje.
Otra vía de enseñanza es escuchar música que nos guste, buscar las letras de las canciones y traducirlas.
Lo que pretendo es que mis alumnos no vean mis clases como ir al colegio, cómo algo aburrido, porque lo que quiero conseguir es que descubran lo maravilloso que es hablar más de un idioma sin morir en el intento.
Y, para ello, se necesita constancia, esfuerzo e ilusión.
Finalmente, cómo ya he dicho, tengo experiencia con miembros de mi familia y amigos y, por lo tanto, me gusta transmitir una serie de valores a mis alumnos, de modo que el día de mañana sean personas admiradas y respetadas.
Ese es el “late motiv” de mis clases.
Gracias por leer hasta el final, espero ser de de agrado.
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