Lo cierto que para mí ha sido un descubrimiento inesperado. Tenía una guitarra en casa, sin usar, y quería aprender. Busqué un profesor de guitarra de iniciación, y me topé con Andrius. Si queréis empezar acudid a él, no solo os enseñará sobre guitarra, sino también os inculcará el amor por la música, en general, desde una perspectiva que pocas profesores os mostrarán. Lo hace con el corazón, con mucha generosidad y sensibilidad. Además de ello, es altruista y desinteresado, puesto que te ayudará a introducirte socialmente en redes de músicos y gente que esté aprendiendo, lo que hará que tu aprendizaje sea aún mayor. Organiza eventos musicales de iniciación y te mantiene informado de conciertos y eventos que te pueden interesar. El precio, también, es económico. Una buena decisión, sin duda alguna. La verdad es que no tenía ni idea de tocar la guitarra y, en tres meses de aprendizaje, he descubierto una habilidad nueva gracias a él.