Llevo aprendiendo idiomas desde que soy niña (crecí viajando y manejo 5 idiomas y 3 dialectos) y sé perfectamente lo que es integrar una nueva forma de hablar. Para empezar hai que desactivar la vergüenza transformándo el aprendizaje en un juego. A ese fin suelo elegir con mi alumno una canción o un tema que le interese mucho y trabajar juntos desde allí. Trabajo tanto a nivel escrito como conversacional insistiendo siempre en este último porque desde allí se desarrollaran las ganas de expandir la comunicación y así mismo el conocimiento del idioma.