Belén Méndez Valledor

Cada estudiante es diferente y por ello las clases se adaptan a tu manera de ser y de aprender. En general, en todas las clases seguimos un orden:

- El estudiante toca las obras que ha preparado en casa a modo de deberes. Hablamos de lo que ha conseguido con respecto a la semana anterior y trabajamos en los puntos que aún se puedan mejorar con diferentes ejercicios.

- Realizamos lectura a primera vista de otras partituras para mejorar el reconocimiento rápido y eficaz de notas, acordes, estructuras y patrones musicales.

- Improvisamos o hacemos ejercicios encaminados a desarrollar la creatividad, el oído, la memoria y la técnica.

En las clases presenciales, además, tocamos a dúo para desarrollar la práctica de conjunto, el oído y la musicalidad.

Para los estudiantes interesados en aprender otros estilos además o en lugar del clásico, dedicamos una parte de la clase a aprender acordes en sus diferentes posiciones y patrones rítmicos típicos de un acompañamiento armónico.