PROFESORA TITULADA EN VIOLÍN. DOY CLASES PARTICULARES DE VIOLÍN Y LENGUAJE MUSICAL

Siendo claro, no le pongo 200 estrellas porque no se puede. Maider no solo es la mejor profesora de violín que se puede tener, sino que sería la mejor profesora de cualquier materia. Ojalá todos los profesores fueran como ella: desde la forma de explicar de forma fácil hasta lo más tedioso en un instrumento ya de por sí complicado, como es el violín, hasta como te mantiene motivado durante la clase y a la hora de hacer los ejercicios en casa. Puedo asegurar que no va a parar hasta que saque lo mejor de ti, adaptando el nivel de exigencia a tu nivel general y velocidad de aprendizaje. Mi consejo es que si te estás planteando el aprender a tocar el violín desde cero, o ya sabes tocarlo pero quieres sacar lo máximo de ti, no te lo pienses porque no te vas a arrepentir. ¡Esta muchacha ha nacido para enseñar!

Es una profesional increíble. Se adapta genial a todos los niveles, incluso a los que empezamos de cero como adultos, pero es muy metódica y perfeccionista. Se fija muchísimo en pequeños detalles de postura, sujeción del arco, expresión... Por poner un ejemplo, en mi caso ya me había acostumbrado a tocar con dolor porque tengo el cuello largo y no sabía coger bien el violín, pero Maider no paró hasta dar con una solución: siempre dice que tocar el violín debería ser igual de relajante que hacer yoga y nunca debería causar dolor. Como profe es muy creativa y se adapta a la forma de aprender de cada alumno. A mí, que aprendo mejor por imitación, me graba tutoriales en vídeo para que pueda seguirla en casa. Se nota que sabe de lo que habla y disfruta muchísimo enseñando: al final acaba contagiándote esa energía y esas ganas de aprender, aunque en la vida hubieras pensado que podrías llegar a tocar el violín.

Empezamos hace 3 años. Las niñas la adoran y siguen sus consejos durante la semana. Con las clases para adulto también muy bien, entiende nuestras circunstancias pero aún así te va siguiendo, exigiendo y progresas. Me gusta como va sonando mi violín.