Como preparadora de oposiciones, intento trasladar, ayudar y compartir con mis alumnos todo aquello que me ha sido de ayuda para conseguir mi plaza. Al mismo tiempo, intento solventar los problemas que yo encontré en mi proceso de oposición.
Mi metodología es la siguiente, sin embargo, según la situación y objetivos del opositor/a, la reorganizo para poder trabajar de acuerdo con sus necesidades...
Como preparadora de oposiciones, intento trasladar, ayudar y compartir con mis alumnos todo aquello que me ha sido de ayuda para conseguir mi plaza. Al mismo tiempo, intento solventar los problemas que yo encontré en mi proceso de oposición.
Mi metodología es la siguiente, sin embargo, según la situación y objetivos del opositor/a, la reorganizo para poder trabajar de acuerdo con sus necesidades:
Las clases (presenciales u online) puede tener una duración de 1 hora, hora y media o dos horas. Las clases online son siempre individuales y las presenciales de 1 o 2 personas, porque por mi experiencia como opositora, es la mejor forma que hay para trabajar.
Semanalmente, mando un tema y un práctico completo (con su answer key). Empezando en el mes de octubre, el opositor, al acabar el mes de abril, habrá recibido y creado alrededor de unos 30 temas. (la cantidad de temas por semana se puede ampliar según el ritmo del opositor y podemos alcanzar los 69 temas).
La idea es que, de semana en semana, el opositor prepare ese teme y realice el examen práctico para poder revisarlos y resolver dudas en la clase posterior.
Puesto que la última convocatoria de oposición cambió y el tema teórico se corrige a partir de ahora sobre escrito, haremos mucho hincapié en la escritura real (en dos horas y a mano) del tema, para poder corregir y mejorar dicha escritura cara al examen de oposición.
Sin embargo, una de las tareas más costosas (puesto que lleva mucho tiempo) es la creación de la programación y unidades didácticas:
Para aquellos que no tienen creada su programación y unidades didácticas, empezamos a crearlas cuanto antes. Yo les ofrezco y paso información de cada uno de los apartados, los vemos juntos y el opositor los desarrolla para la próxima semana. De nuevo, el objetivo es que, a inicios del mes de abril, o si se puede, antes, empecemos con las defensas orales de dicha programación y unidades, porque, siendo realistas, pocos tribunales se van a leer vuestras programaciones, os van a ver, escuchar, sentir y ahí es donde os tenéis que lucir.
Para aquellas personas que vayan más avanzadas con la programación y unidades: revisaremos todo al detalle, intentado mejorarlo, ser más creativos y originales. Una vez lo tengamos listo, empezaremos con las defensas.
Es un trabajo duro, pero con mucho trabajo y disciplina se puede conseguir. Para ello, yo os ayudaré poniéndoos deadlines para que la preparación sea lo más organizada posible.
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