Nora Esther Machín Bejarano

Creo que suspender matemáticas no es una cuestión de inteligencia sino de confianza.

LLevo quince años dando clase de matemáticas y física en Boadilla y otros pueblos cercanos de Madrid. Muchos alumos y exalumnos de los institutos y principales colegios de Boadilla pueden dar buenas referencias de mi.
He tenido muchos alumnos con notas altas en la EBAU , alumnos que cuando llegaron a mi incluso suspendían.
Intento hacer la clase amena y me adapto al nivel del alumno para empezar a mejorar desde ahí. Miro continuamente que el alumno no se haya perdido haciendo pequeñas preguntas. Trato de hacerle ser consciente de sus posibilidades, que siempre suelen ser más que suficientes...
A raiz del confinamiento, por no perder los alumnos que tenía que no podían venir a casa, empecé a dar clases online . Fue un exito y por eso, ahora ofrezco también clases online ( por Skype u otra plataforma que pudiese surgir).
Para dar clases de este modo me ayudo de una gran pizarra blanca que se ve muy bien en la cámara del ordenador y es casi como dar la clase presencial.
Desde el principio, lo importante para mi es despegar y que el alumno supere el bloqueo que a menudo tiene, así como el desánimo por las matemáticas. Lo normal es que en seguida se vea capaz de sacar buenas notas.
No creo en la enseñanza de aprender por repetición absurda de 50 ejercicios iguales (como a veces mandan en los colegios) . Creo que es mejor seleccionar los ejercicios y entenderlos. A menudo es suficiente con que el alumno trabaje 20 mtos al día para obtener grandes resultados.