Yo empecé “obligado” por mi mujer. Recuerdo que en la primera clase le dije a Fran: “No he bailado en mi vida, no tengo sentido del ritmo, me trae mi mujer a la fuerza y no pienso pagar, así que expúlsame cuando quieras!!” ... y después de más de un año sigo bailando en sus clases y me gusta mucho.
Está claro que ha conseguido un milagro conmigo!
Gracias Fran
Ver más
Ver menos