Siempre me ha gustado ofrecerle mi apoyo a niños y niñas. Por ello, al finalizar la carrera, realicé mis prácticas como profesional en una fundación de Huelva con menores absentistas.
En tres ocasiones he impartido clases particulares: Primero a niños y niñas de quinto de primaria. Después a niños y niñas de entre 14 y 17 años combatiendo su absentismo escolar. Durante esta experiencia planificaba dinámicas y juegos que garantizaban su diversión a la vez que aprendían. Por último, he impartido clases particulares a dos niñas, de manera más exclusiva.