Hablar de Laura sería narrar un sin fin de historias que marcaron mi vida para siempre. Fui estudiante de Laura mientras cursaba la Escuela Nacional de Artes en la Habana.Cuba, fui muy dichosa de contar no solo con una magnífica maestra de violoncello que me tomo de las manos hasta graduarme , sino también de contar con una excelente persona capas de mantener un balance exacto entre amiga incondicional y maestra exigente al mismo tiempo. Han pasado ya varios años ( unos 12 sino me fallan las matemáticas ) y sigue siendo ella a quien recurro ante cualquier duda musical. Con ella encontrarán la magia en sus conocimientos y en ser humano excepcional.