Lucía Moya Fernández

Mi experiencia en muchos ámbitos del diseño y la arquitectura me hace una persona muy formada en este ámbito, conociendo multitud de softwares y procedimientos de proyección, cálculo de diferentes magnitudes y conocimientos artísticos. He impartido clases en muchas ocasiones a lo largo de mi vida, voluntariamente a conocidos, autónoma y particularmente a niños de eso y con empresas más en el ámbito ocio-deportivo a niños de primaria y eso, por lo que estoy perfectamente familiarizada con los más jóvenes.

El no haber parado de estudiar, el tener una hermana actualmente en bachillerato y mi experiencia con niños, me hace ser muy empática y delicada a la hora de entender como aprendemos cada uno, tratando de obtener los mejores resultados de cada persona sin abandonar la necesidad de disfrutar con lo aprendido, para lo cual es ESENCIAL conocer la utilidad y aplicación de lo mismo, de ese modo permanece en la memoria y no solo se aprueba el examen, sino que se aprende para el futuro.

En mi carrera, la cual abarca muchos sectores y aspecto de la sociedad, me enseña que todo aprendizaje es útil y aplicable en algún momento, pero que sin interés no hay atención y sin atención no hay dedicación suficiente del cerebro para que el aprendizaje sea válido, muchas veces aprendemos mantras que no sabemos utilizar, enseñar el como, porque y para qué da las herramientas para desglosar las problemáticas con cualquier variable que se nos presente y conseguir el resultado correcto, ya que en todo momento se tiene control sobre la operación.