Luis Conca

Doy clases de inglés a todo tipo de alumnos. La mitad de mi educación fue en España y la otra en EEUU, por lo que comprendo a la perfección las dificultades a las que se enfrentan los alumnos del idioma. Procuro despertar el interés por comunicarse en inglés, y hago mucho hincapié en la comprensión del idioma para evitar que los estudiantes se limiten a traducir sus pensamientos del castellano.

La metodología de las clases varía en función del objetivo de las mismas: desde cursos intensivos para preparar un examen o prueba concreta (que implica enfocarse en los requisitos de la prueba en cuestión) hasta clases de refuerzo o iniciación para profesionales (enfocadas en aumentar la fluidez de la comunicación, aumentar el rango de vocabulario y mejorar la comprensión lectora y oral de cara a conversaciones y comunicaciones de empresa).

Las clases duran una hora y la frecuencia depende de las necesidades de cada estudiante. Empezamos analizando el nivel con el que cuenta ya el estudiante, no sólo para poder organizar el material a impartir, sino para que los propios alumnos puedan comprobar los avances en el tiempo. Además, es fundamental para reconocer los obstáculos particulares de los estudiantes y solventarlos.

Por otro lado, de cara a pruebas concretas, también realizo exámenes de prueba con tests de años anteriores (cuando sea posible) o con pruebas propias diseñadas para asemejarse lo más posible a los escenarios reales a los que se enfrentarán los alumnos en los exámenes. En cuanto a profesionales, el enfoque está más dirigido a incrementar la comunicación, para lo cual es imprescindible conocer (aunque sea de forma superficial) la forma de trabajar de distintos sectores, de modo que la conversación sea lo más realista posible.