Martín Campos Clausell

Durante el año pasado impartí clases particulares a un chico de 2° de ESO que iba al mismo instituto que yo. Como la mayoría de cosas que él daba yo ya las había dado igual y con los mismos profesores, se me hizo fácil poder enseñarle el temario. Además, usualmente lo acompañaba a casa para que me fuera contando que deberes tenía, de esta forma en casa nos poníamos directos a la faena. El chico pasó de suspender 4 asignaturas a pasar con todo aprobado. Además, al haber estado en Irlanda y haberme preparado el B2 con profesor particular posteriormente, adquirí un nivel más que suficiente como para hacer explicaciones en inglés. La metodología para chicos de secundaria no tiene que ser tampoco muy disparatada, simplemente hacer los deberes y adelantarse un poco en el temario así cuando lo explica el profesor ya tiene las cosas un poco ordenadas y lo puede entender mejor.