Miguel Gámez Ruiz

Una buena metodología es aquella que es diferente para cada persona. Lo que a uno le funciona a otro puede no hacerlo. Por eso mi método de trabajo se centra en encontrar los puntos fuertes de los alumnos y potenciarlos. Busco transmitir confianza, tranquilidad y entusiasmo a mis alumnos. En base a estos tres pilares es fácil construir un aprendizaje sólido. Mi pasión es enseñar, pero para hacerlo hay que recordar que el conocimiento no es algo aburrido. Un punto clave de las clases debe ser la presencia del humor. No todas las asignaturas son divertidas, pero eso no significa que durante el aprendizaje no puedan salir sonrisas.
Soy una persona comprometida con las metas que me marco. Si a su hijo/a se le vuelve complicada una asignatura, ahí estaré yo para darle la vuelta a la situación. Una de las mejores virtudes que tengo a la hora de enseñar es la empatía. Hace un tiempo yo también era alumno, por lo que conozco de primera mano lo que están pasando y siempre trataré de ponerme en su lugar. En cuanto a mí experiencia, puedo decirles que durante todo el proceso de mi formación, he destacado por ayudar a los compañeros que tenían dificultades para superar materias. Es para mí un verdadero éxito ver cómo los demás consiguen aquello que pensaban imposible. Estimados padres vuestros hijos son capaces de hacer cosas increíbles, solo tienen que convencerse de ello. Y por eso me pongo a vuestra disposición, para que con mi ayuda, lleguemos a buen puerto y recojamos los frutos de un trabajo bien hecho.