Norman es un crack de la batería, una bestia tocando! Aunque fuera de ella, es un tipo sencillo y cercano.
Yo le conocí porque mi pareja decidió regalarme un curso de batería... y acabé estando 5 años con él!
Sin tener apenas idea de música ni percusión, Norman me enseñó desde el principio: a interpretar partituras, a trabajar la independencia de manos y pies, a desarrollar mi sentido del ritmo...
La verdad, yo no era un estudiante muy aplicado y no practicaba mucho fuera de las clases, ya que no tenía una banda con quien tocar, pero disfrutaba tanto estando con él, haciendo clase y viéndole tocar que merecía la pena.
Debo decir que su paciencia conmigo fue infinita, pues él habría querido avanzar más rápido, pero supo adaptar sus clases al nivel que realmente tenía y siempre sabía proponer cosas nuevas para que no me aburriera.
Sin ninguna duda, tanto si eres un novato en esto de la batería, como si eres un músico experimentado, Norman es tu hombre. Disfrutarás y aprender
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