Irene me imparte clase de análisis musical. Soy un aficionado a la música que quiere llegar a entenderla mejor a nivel teórico y estructural. Pues bien, Irene tiene todo aquello que se le puede exigir a alguien que consideramos un profesor bien cualificado para la enseñanza: competencia, responsabilidad y capacidad comunicativa.
1º Competencia porque tiene los conocimientos y la formación adecuada para encarar con destreza y profundidad el análisis de cualquier obra, por sencilla o enrevesada que esta sea, de cualquier época (desde el medievo hasta la contemporaneidad).
2º Responsabilidad por la seriedad con la que prepara previamente sus clases y el bagaje pedagógico con el que acompaña éstas: copias analizadas de las partituras analizadas, bibliografía, grabaciones ...
3º Y finalmente, por encima de todo, por su capacidad de transmitir sus conocimientos, de explicarse y hacerse entender, teniendo siempre presente el nivel de formación musical de la persona a la que da clase.
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