Había contactado desde Suiza a través de Internet con Rosa para tener clases particulares de español en Cadiz durante una semana con el fin de mejorar mis habilidades orales. Así que estas reuniones no se llevaron a cabo en una escuela, sino en cafés de la calle, restaurantes, bares o en la playa. En muy poco tiempo, aprendí mucho de la lengua, de los lugareños y de su vida cotidiana en esta ciudad y me sentí como en casa y disfruté de las playas, el marisco y el flamenco.
Gracias a Rosa, pude sumergirme tanto lingüística como culturalmente en Cadiz, fue muy enriquecedor. Rosa hablaba muy claro para que yo pudiera entender y así practicar más. Aprendí mucho y la recomiendo al cien por cien, le agradezco a Rosa esta experiencia.
Después de mi regreso a Suiza me mantuve en contacto con Rosa a través de las clases por Skype. Rosa siempre es positiva y entretenida. También gracias a sus clases soy capaz de leer y comprender la literatura original o los periódicos después de dos años.