Empecé a tocar el saxo a primeros del año 2024, con 62 años, sin ninguna noción de música y con la casi ridícula idea de que algún día, si tenía la paciencia suficiente (el profesor y yo) podría divertirme tocando alguna pieza.
pues bien, algo más de seis meses después, contra todo pronóstico, me divierto, toco con cierta solvencia tres piezas y alguna más que ya me permito yo sacar por mi cuenta. Evidentemente la infinita paciencia de Sergio y su método son la única razón de este éxito. Y si a esto le sumas que de vez en cuando él toca algo es un privilegio.
Gran profesor, gran persona. Recomendable 100%
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