Sonia

Después de 10 años viviendo en Reino Unido, el inglés dejó de ser solo un idioma para mí: se convirtió en parte de mi día a día. Allí descubrí no solo una forma diferente de comunicarme, sino también lo mucho que disfrutaba compartiendo ese conocimiento con otras personas.

Soy una persona cercana, tranquila y práctica. Me encanta ver cómo mis alumnos ganan soltura y seguridad sin agobios, a su ritmo, y con clases adaptadas a lo que realmente necesitan.

En casa también vivo este aprendizaje cada día: tengo dos peques bilingües con los que hablo en inglés desde que nacieron, y eso me ha enseñado muchísimo sobre cómo interiorizamos un idioma de forma natural.

No busco clases perfectas, sino reales, útiles y amenas. Y sobre todo, que te hagan sentir que sí puedes con el inglés.

He trabajado con alumnos de perfiles muy distintos: desde peques que necesitan soltarse con el idioma jugando, hasta adultos que buscan retomar el inglés después de años. Y eso me ha enseñado que todos podemos aprender si encontramos la forma que mejor se adapta a nosotros. Esa es mi prioridad: ayudarte a encontrarla.

Me gusta crear un ambiente relajado en el que puedas expresarte sin miedo a equivocarte. Porque aprender un idioma no va solo de gramática, también va de confianza, de perder el miedo y disfrutar del proceso. Cada alumno es único, y para mí, lo importante es acompañarte con paciencia, humor y mucha práctica real. Si buscas clases flexibles, cercanas y efectivas, estaré encantada de ayudarte.


¡Hablamos!