Las clases han de convertirse en un espacio dialógico fluido donde las preguntas y respuestas formen parte de la propia dinámica de la enseñanza. La educación la dejo para el propio alumno. Mi cometido es enseñar, mostrar, realidades en forma de contenidos abiertos para que el alumno reflexione acerca de lo que está recibiendo. Será él, el que cierre esas enseñanzas y las convierta en conocimient...
Las clases han de convertirse en un espacio dialógico fluido donde las preguntas y respuestas formen parte de la propia dinámica de la enseñanza. La educación la dejo para el propio alumno. Mi cometido es enseñar, mostrar, realidades en forma de contenidos abiertos para que el alumno reflexione acerca de lo que está recibiendo. Será él, el que cierre esas enseñanzas y las convierta en conocimiento útil, tanto para su asignatura, como para su futura utilización en el día a día. La historia como el arte, son espacios para ver, entender, deconstruir y resignificar. Esa es la misión que deben cumplir mis enseñanzas sobre el conocimiento concreto que les expongo.