Ciao!
Soy Virginia, pero podéis llamarme Vivi.
Nací en Turín, en Italia pero me mudé a Estados Unidos cuando tenía 16 años y a los 18 a Donostia - San Sebastián. Así que sí, mi perfil es definitivamente internacional.
Empecé a dar clases de italiano cuando era muy joven, al tener primos americanos, ingleses y españoles que querían mejorar el idioma: a algunos les costaba hablar, a otros esc...
Ciao!
Soy Virginia, pero podéis llamarme Vivi.
Nací en Turín, en Italia pero me mudé a Estados Unidos cuando tenía 16 años y a los 18 a Donostia - San Sebastián. Así que sí, mi perfil es definitivamente internacional.
Empecé a dar clases de italiano cuando era muy joven, al tener primos americanos, ingleses y españoles que querían mejorar el idioma: a algunos les costaba hablar, a otros escribir...y bueno, ahora que somos todos mayorcitos, es muy cómico ver como en las cenas familiares dos pueden estar hablando italiano, otros dos español y tres inglés. Pero no importa el idioma que hablemos, porque nos entendemos sea cual sea.
Me encanta este trabajo porque ¡no parece un trabajo para nada! Conoces a mucha gente, muchas culturas, hábitos...y es una hora en la que el alumno aprende pero de la mejor manera, que es divertiéndose. En la primera clase intento conocer a mis alumnos, les pregunto qué les gusta, para poder empezar a estudiar los vocabulos, por ejemplo, que más interesan y que seguramente les sea más fácil memorizar. Con los más pequeños, intento que asocien un sonido a cada palabra, por lo que conmigo aprenden muchas canciones (y sus respectiva traducciones) y de deberes suelen tener....¡ver dibujos animados en inglés!
La mejor forma de aprender idiomas es divertirse, y eso es lo que intento hacer en cada clase. Así que ¡vamos allá!
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