Siempre dando nunca recibiendo hasta con el gato

Casi nadie presta atención a cómo te sientes tú.


Y eso es muy poco inteligente


No te voy a exagerar.


No es necesario exagerar.


Pero si aprendes a entender lo que realmente quieres y necesitas en tu relación con tu gato, todo cambia para siempre.


Te enseñaré una sorprendente y poco conocida habilidad para identificar tus verdaderos deseos y expectativas, que transformará cómo vives con tu gato, incluso si pensabas que ya lo hacías todo bien.

Pero debes tener claro:


Olvida los consejos de expertos que no se adaptan a ti.

Olvida todo lo que has leído en redes sociales.

Olvida lo que te dicen que “deberías” hacer.

Olvida todo eso. No se trata de seguir normas ajenas.


Mucha gente se centra en aprender todo sobre las necesidades de su mascota sin detenerse a pensar en lo que ellos mismos desean.


Y tampoco saben lo que es amar

Pero si no tienes claro dónde estás y hacia dónde quieres ir, cualquier estrategia será en vano.

Aprender a fijar objetivos claros y precisos es la base para tener éxito.

Eso no tiene nada que ver conmigo y tus gatos.


No lo digo porque yo me dedique a ello, lo digo, porque da igual lo bueno que seas, que si no sabes adonde vas, no conseguirás nada en esta vida.

Así que ahí va mi opinión no solicitada de hoy.

Aprende a fijar tus propias metas, tú, tus hijos y hasta el gato.

Eso es así y explica porque el 92% de la gente no alcanza sus metas y abandonan a los tres meses.

Fallan.

No obtienen resultados.


Nada.


¿y sabes cual es la razón principal?

No saben lo que quieren.

No saben qué es lo que realmente va mal.

No saben porqué se sienten frustradas.

No saben dónde tienen que poner sus esfuerzos.

No será culpa del método.

Ni del gato.


Será por no tener claro qué es lo que quieren.


Y los que saben fijarse objetivos personales y precisos no solo mejoran la convivencia con sus gatos; experimentan un cambio profundo en su vida.

Empiezan a disfrutar de pequeños momentos de conexión, entienden mejor las necesidades de su gato y, sobre todo, viven la relación que desean.

No es magia, es tener un plan y trabajar en él con claridad y propósito.


Estas personas, que apr