Descripción del anuncio
Sintetizada muy sucintamente, mi experiencia, en calidad de estudiante en prácticas curriculares para una entidad colaboradora, consistió en la elaboración de contenido didáctico con arreglo al Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCERL), cuyos niveles se corresponden, respectivamente, con los clasificados en A, B y C, que a su vez se subdividen en los niveles A1, A2, B1, B2, C1 y C2. Mi experiencia también se basó en la elaboración de contenido didáctico destinado a minijuegos de aprendizaje del español como lengua extranjera, así como en la adaptación de un guion conducente a un videojuego de aprendizaje del español como lengua extranjera, basado en un capítulo de la obra cumbre de las bellas letras hispánicas, "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha", con traducciones al inglés de los parlamentos e intervenciones de don Quijote.
Asimismo, mi experiencia en la impartición de enseñanza de lengua española (en sus múltiples planos o niveles lingüísticos: fonético-fonológico, morfosintáctico y léxico-semántico) y de las literaturas hispánica y grecolatina permite sustanciar una instrucción omnicomprensiva, consistente en la adquisición de conocimientos tanto idiomáticos como literarios.
La enseñanza de los idiomas debe fundamentarse en la adquisición de conocimientos no solo gramáticos, sino también pragmáticos y analítico-discursivos, a lo que se presta especial atención.
A todo lo expuesto con anterioridad se le puede sumar la enseñanza de nociones más avanzadas, concernientes, verbigracia, a la poesía (prosodia y métrica, figuras retóricas, tropos literarios, etc.), a la mitología (griega y latina), a la etimología (creación y evolución de las palabras desde su estadio original hasta el patrimonial), etc.
Habida cuenta del conocimiento de diversas lenguas modernas (inglés, francés, portugués, italiano y rumano), de una programada, planificada o artificial (esperanto) y de dos clásicas (latín y griego clásico), la enseñanza del español se puede complementar y consolidar con concomitancias con las antedichas lenguas, lo que coadyuva a una asimilación más práctica y lógica de las estructuras más complejas de la lengua española.
En posesión de dos grados universitarios: Filología Clásica y Filología Hispánica (ambas titulaciones cursadas en la Facultad de Filología de la Universidad de Sevilla).